Un nuevo artículo revisado por pares analiza la evolución y la dieta occidental actual para ayudar a explicar los comportamientos maníacos.
Una nueva investigación sugiere que condiciones como el síndrome de déficit de atención con hiperactividad (TDAH), el trastorno bipolar e incluso los comportamientos agresivos pueden estar relacionados con el consumo de azúcar y que puede tener una base evolutiva.
La investigación, publicada hoy en el campus médico Anschutz de la Universidad de Colorado y publicada en Evolución y comportamiento humano , presenta una hipótesis que respalda el papel de la fructosa, un componente del azúcar y el jarabe de maíz con alto contenido de fructosa, y el ácido úrico (un metabolito de la fructosa), en el aumento del riesgo de estos trastornos del comportamiento.
"Presentamos evidencia de que la fructosa, al reducir la energía en las células, desencadena una respuesta de búsqueda de alimento similar a la que ocurre con la inanición", dijo el autor principal, Richard Johnson, MD, profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Colorado en el campus médico de CU Anschutz.
Johnson describe una investigación que muestra que una respuesta de búsqueda de comida estimula la toma de riesgos, la impulsividad, la búsqueda de novedades, la toma de decisiones rápida y la agresividad para ayudar a asegurar los alimentos como respuesta de supervivencia. La sobreactivación de este proceso por el consumo excesivo de azúcar puede causar un comportamiento impulsivo que puede ir desde el TDAH hasta el trastorno bipolar o incluso la agresión.
“Si bien la ruta de la fructosa estaba destinada a ayudar a la supervivencia, la ingesta de fructosa se disparó durante el siglo pasado y puede estar a toda marcha debido a las altas cantidades de azúcar que se encuentran en la dieta occidental actual”, agrega Johnson.
El artículo analiza cómo la ingesta excesiva de fructosa presente en los azúcares refinados y el jarabe de maíz con alto contenido de fructosa puede contribuir a la patogenia de los trastornos del comportamiento asociados con la obesidad y la dieta occidental.
Johnson señala:"No culpamos al azúcar por el comportamiento agresivo, sino que señalamos que puede ser uno de los contribuyentes".
Johnson recomienda más estudios para investigar el papel del azúcar y el ácido úrico, especialmente con nuevos inhibidores del metabolismo de la fructosa en el horizonte.
“La identificación de la fructosa como un factor de riesgo no niega la importancia de los factores genéticos, familiares, físicos, emocionales y ambientales que dan forma a la salud mental”, agrega.
Referencia:"La fructosa y el ácido úrico como impulsores de una respuesta hiperactiva de forrajeo:¿una pista sobre los trastornos del comportamiento asociados con la impulsividad o la manía?" por Richard J. Johnson, William L. Wilson, Sondra T. Bland y Miguel A. Lanaspa, 16 de octubre de 2020, Evolución y comportamiento humano .
DOI:10.1016/j.evolhumbehav.2020.09.006