La vitamina E es un ingrediente común en los productos para el cuidado de la piel, que se utiliza por sus propiedades antienvejecimiento y protectoras de las células. Sin embargo, esta vitamina no solo protege las células de nuestra piel sino todas las células del cuerpo contra el daño causado por los radicales libres.
¿Qué es la vitamina E?
La vitamina E es una vitamina liposoluble que existe en ocho formas diferentes; sin embargo, de esos, nuestro cuerpo solo usa α-tocoferol.
¿Cuáles son las funciones de la vitamina E?
La vitamina E es uno de los guardaespaldas más importantes de nuestras células, protegiendo sus membranas del daño causado por los radicales libres. Los radicales libres son moléculas inestables formadas en nuestro cuerpo durante el metabolismo normal o durante la exposición a factores ambientales, como el humo del cigarrillo o la contaminación. La vitamina E ayuda a neutralizar los radicales libres, evitando que alteren otras moléculas en las células y eventualmente causen daños irreparables a la función de las células.
La vitamina E también mantiene nuestras células sanguíneas saludables y ayuda a que nuestros nervios funcionen correctamente, ayudándolos a llevar mensajes entre el cerebro y el cuerpo. Además, desempeña un papel en la prevención de la formación de coágulos en la sangre y apoya el funcionamiento saludable de nuestro sistema inmunológico.
¿Cuánta vitamina E necesito al día?
La cantidad de vitamina E que necesita por día cambia según su edad, sexo y etapa de la vida.
El valor dietético de referencia (DRV)* para adultos sanos (mayores de 18 años), incluso durante el embarazo y la lactancia, es de 11 a 13 mg de vitamina E por día.
Podemos obtener suficiente vitamina E de nuestras dietas comiendo una variedad de alimentos. Seguir las pautas dietéticas de su país sobre una dieta sana y equilibrada lo ayudará a satisfacer sus necesidades de vitamina E.
* Estos valores se basan en las estimaciones de ingesta adecuada (IA) de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA). No deben interpretarse como objetivos de nutrientes. Para obtener más información sobre los DRV en Europa haga clic aquí .
¿Qué alimentos contienen vitamina E?
Podemos encontrar vitamina E en una variedad de alimentos, pero algunas de sus fuentes más ricas incluyen:
- aceites vegetales
- untables de grasas vegetales
- nueces y semillas
- algo de pescado graso
- yema de huevo
- cereales integrales.
¿La vitamina E interactúa con otros nutrientes?
La vitamina E y la vitamina C a menudo se unen en sus funciones antioxidantes en nuestras células. Cuando la vitamina E neutraliza un radical libre, pierde sus propiedades antioxidantes, que pueden regenerarse con la ayuda de la vitamina C. Los buenos niveles de estas dos vitaminas son particularmente importantes para quienes fuman, ya que son más propensos a formar cantidades más altas de radicales libres. radicales en el cuerpo.
A su vez, la ingesta excesiva de vitamina E puede reducir los niveles de vitamina K, al hacer que nuestro cuerpo se descomponga y elimine más de esta última. Esto es particularmente dañino para las personas que ya tienen niveles bajos de vitamina K (por ejemplo, debido a condiciones de salud específicas o al uso de anticoagulantes), ya que puede afectar la coagulación normal de la sangre y aumentar el riesgo de sangrado.
La vitamina E se absorbe mejor cuando se combina con alimentos que contienen grasas. A menudo, esta vitamina ya abunda en alimentos naturalmente grasos, como el salmón, los aceites vegetales y las nueces, que ayudan a su absorción en el intestino. En otros casos, puede ser beneficioso combinar alimentos ricos en vitamina E (como algunos cereales integrales) con grasas saludables (como el aceite de oliva) para lograr el mismo efecto.
¿Qué sucede si tengo muy poca vitamina E?
La deficiencia de vitamina E no es común ya que la mayoría de las personas obtienen las cantidades recomendadas de esta vitamina de la dieta. Por lo general, le sucede a personas con enfermedades que dificultan la absorción de grasas y vitaminas liposolubles de los alimentos.
En las personas con un trastorno genético que provoca una deficiencia grave de vitamina E, puede provocar problemas neurológicos, como falta de coordinación y control muscular. Sin embargo, hasta la fecha, aún se desconoce qué síntomas pueden causar las dietas bajas en vitamina E en individuos sanos.
¿Qué sucede si tengo demasiada vitamina E?
La vitamina E de los alimentos no se considera dañina ya que es poco probable que obtengamos demasiada de los alimentos solos.
Sin embargo, se recomienda que los adultos sanos, incluso durante el embarazo y la lactancia, no consuman más de 300 mg de vitamina E por día, que es aproximadamente 27 veces más que el DRV de esta vitamina.
¿Cuándo debo prestar más atención a mi ingesta de vitamina E?
Una deficiencia de vitamina E no es común para la población en general, ya que la mayoría de las personas pueden obtener las cantidades recomendadas de esta vitamina a través de una dieta variada y equilibrada.