¿La falta de sueño causa aumento de peso? El sueño es un problema para muchas personas, con más del 50% de la población que tiene sueño irregular o se queja de problemas para dormir. Además, la obesidad también es un problema en el Reino Unido, con un 23,1 % de la población clasificada con sobrepeso. Estas dos epidemias, aunque separadas en muchos aspectos, parecen superponerse en ciertas áreas.
Se han escrito muchos artículos diferentes y se han llevado a cabo estudios para determinar el impacto que la falta de sueño y nuestros patrones de sueño tienen en nuestros cuerpos. Los resultados de estos parecen apuntar a la falta de sueño, ya que una mala rutina de sueño está relacionada con una dieta deficiente y el aumento de peso.
Tasa metabólica
Se ha demostrado que la privación del sueño es significativa en relación con nuestra tasa metabólica. A medida que nuestros cuerpos han evolucionado, han llegado a tener una tasa metabólica alta durante las horas de comida, es decir, durante el día. Luego, nuestro metabolismo se ralentiza durante las horas en que nuestros cuerpos consideran que estamos naturalmente dormidos, es decir, durante la noche; como no comemos nada cuando estamos dormidos, no necesitamos nuestro metabolismo para procesar ningún alimento.
Al interrumpir este ciclo, y comer durante las horas en que normalmente dormimos, y dormir durante las horas que nuestro metabolismo considera como "tiempo de vigilia", los alimentos que comemos no se procesan con la eficacia que deberían. Necesitamos estar despiertos y en movimiento durante las horas en las que comemos, para activar nuestro metabolismo y quemar las calorías que ingerimos. Y seamos realistas, si vas a tomar un refrigerio a medianoche, ¡muy rara vez será una ensalada!
Por lo tanto, para poner su metabolismo en marcha, necesita ajustar su patrón de sueño para ajustarse a los tiempos naturales de alimentación. Evitar acostarse (sé que esto es difícil los fines de semana) y asegurarse de hacer ejercicio durante el día es fundamental para dormir a la hora adecuada y, a su vez, se correlaciona con su tasa metabólica.
Hormonas
Cuando estamos cansados producimos más de una hormona llamada 'Ghrelin'; esta es una hormona producida por nuestro cuerpo que nos recuerda comer. Por lo tanto, esto significa que la falta de sueño y el hambre van de la mano.
Además, cuando estamos cansados nuestro organismo carece de la hormona 'Leptina'; esta hormona nos dice que dejemos de comer. Esto conduce a un escenario de 'Doble golpe' que ha sido explorado y comentado por el profesor Matthew P. Walker de la Universidad de California. Él destaca que un cerebro somnoliento responde más a la comida chatarra y tiene menos capacidad para refrenar el impulso de comer.
Tu cerebro te está haciendo un flaco favor desde dos ángulos diferentes a la vez, lo que hace que sea extremadamente difícil controlar la cantidad de calorías que comes cuando estás cansado. Por lo tanto, podemos ver por qué el aumento de peso es un problema relacionado con el cansancio, ya que un cerebro somnoliento tiene poco control sobre sus elecciones de alimentos.
La prueba está en el pudín
Nuestros cuerpos anhelan alimentos calóricos cuando estamos agotados o cansados, ya que anhelamos azúcares de "solución rápida" que pueden convertirse en energía para mantenernos en marcha. Además, estos 'alimentos malos' aumentan los niveles de serotonina en nuestro cerebro, haciéndonos sentir más felices psicológicamente. Desafortunadamente, muchos de los alimentos que anhelamos tienen un alto contenido de grasa y azúcar refinada, lo que aumenta significativamente el aumento de peso.
Cuando estamos cansados, la preparación y cocción de alimentos frescos se convierte en una tarea ardua. Los alimentos para microondas y las comidas para llevar tienen un contenido extremadamente alto de sal y generalmente son una mala alternativa para cocinar frescos. Cualquiera que controle su peso debe asegurarse de tener una buena rutina de sueño, ya que evita estos hábitos dañinos de cansancio. Ya sea en el trabajo o en la socialización en lo que estamos ocupados, el sueño debe ser una prioridad para poder llevar una vida sana y más liviana.
El aumento de peso es algo que se puede evitar con una alimentación saludable, ejercicio regular y sueño suficiente. Un patrón de sueño regular y la comodidad en el dormitorio son la clave para una buena noche de sueño, lo que a su vez reduce el riesgo de aumento de peso.