Peligros de comer arroz blanco todos los días

 Food Additives >> Aditivos alimentarios >  >> Comida sana

Muchas personas en muchos países dependen del arroz como alimento básico diario. Si bien hay varios tipos de arroz, el arroz blanco parece ser el más popular. Quizás como no lo hemos pensado mucho, algunos de nosotros todavía consumimos regularmente arroz blanco.

Al arroz blanco se le ha quitado el salvado y el germen durante el proceso de refinación, según explica Healthline. El germen de arroz es extremadamente nutritivo y una de las partes más saludables del grano.

Debido a esto, el arroz integral retiene una pequeña cantidad de estos fitonutrientes. Existe cierta preocupación de que comer demasiado arroz blanco pueda ser perjudicial para la salud. Una dieta rica en arroz blanco puede aumentar el riesgo de tres problemas de salud:

1. El consumo regular de arroz blanco puede provocar toxicidad por arsénico. Los problemas de salud surgen cuando el arsénico se acumula en el cuerpo. Limitar su consumo de arroz blanco puede ayudarlo a evitar el envenenamiento por arsénico. No se recomienda incorporar arroz como fuente principal de carbohidratos.

En segundo lugar, comer arroz blanco todos los días puede aumentar el riesgo de síndrome metabólico. Los síndromes metabólicos pueden conducir a una variedad de condiciones médicas graves, que incluyen derrames cerebrales, diabetes y enfermedades cardiovasculares. Los posibles efectos secundarios incluyen hipertensión y obesidad central. Algunos estudios sugieren que comer mucho arroz blanco puede aumentar la probabilidad de enfermarse.

La falta de fibra en el arroz blanco lo hace fácil de digerir. Este es especialmente el caso si se consume sin otros alimentos ricos en fibra como los frijoles. Para ser rápidamente absorbido por el cuerpo, debe ser fácil de digerir.

Aumenta los niveles de glucosa en la sangre, lo que a su vez aumenta el riesgo de diabetes. Aquellos que están preocupados por su salud cardiovascular también deben evitar hacer esto. Los altos niveles de glucosa en la sangre que no se utilizan como energía pueden provocar la formación de placa en las arterias y otras complicaciones.