Los mangos son algunas de las frutas tropicales más queridas en todo el mundo. Emiten sabores dulces y tienen una textura jugosa y delicada similar a la consistencia de la mantequilla cremosa. Si bien los perfiles de sabor exactos de la pulpa pueden variar según los cultivares, todos los mangos tienen una cáscara exterior protectora que cambia los tonos de naranja amarillento a rojo cuando maduran. Por lo general, esta cáscara rojiza se tira a la basura cuando se corta un mango.
Pero si está acostumbrado a comer cáscaras de otras frutas (por ejemplo, kiwis, peras y manzanas) por su alto contenido de fibra y fitoquímicos, es natural preguntarse si esto también se aplica a las cáscaras de mango. Según WebMD, es completamente seguro comer la piel. ¿Pero deberías? Sopesemos los pros y los contras.
Un estudio de 2015 encontró que las cáscaras de mango contienen altas cantidades de vitamina C, vitamina E, polifenoles, carotenoides y otros compuestos útiles. Los polifenoles en particular (que también se encuentran en el té y el café) exhiben propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que pueden reducir las probabilidades de enfermedades cardiovasculares, comparte un estudio publicado en Current Atherosclerosis Reports.
Las cáscaras de mango también tienen un alto contenido de fibra, señala un estudio anterior publicado en Food Chemistry. Los investigadores explican que las cáscaras representan el 20% de la fruta, y cuanto más maduro es el mango, más fibra tiene la piel. El alto contenido de fibra que se encuentra en las cáscaras de mango también reduce las posibilidades de enfermedad diverticular, dice WebMD.
Las desventajas de comer cáscaras de mango
Entonces, ¿debería apresurarse para agregar cáscaras de mango a su plato de desayuno? Tal vez no. Echando un vistazo a los inconvenientes, hay un par de factores a considerar antes de colocar la piel en la boca.
A diferencia de su vecino carnoso, la corteza no es dulce. Las cáscaras suelen ser amargas con una textura dura que es difícil de masticar, por lo que puede llevar un minuto acostumbrarse, explica WebMD.
Además, comer la piel podría desencadenar una reacción alérgica en algunas personas, ya que la cáscara del mango contiene un compuesto llamado urushiol (a través de Healthline). Este es el mismo químico que se encuentra en el roble venenoso y la hiedra venenosa.
Además, consumir cáscaras de mango también podría aumentar su exposición a pesticidas, advierte Healthline. La exposición alta y rutinaria a los pesticidas puede causar efectos agudos en la salud (por ejemplo, erupciones cutáneas, mareos, diarrea y más) y efectos crónicos en la salud (por ejemplo, cáncer, problemas reproductivos, daño al sistema endocrino, etc.), señala Californians for Pesticide Reform. .
Dicho esto, las cáscaras de mango todavía se consideran seguras para comer y están llenas de nutrientes y fibras. Entonces, si no es alérgico y puede superar el sabor y la textura, agregar cáscaras de mango puede ser una gran adición a su dieta. Pero no es necesario.
Healthline comparte que puede obtener todas las vitaminas, antioxidantes y fibra que su cuerpo necesita al comer alimentos integrales diversos y coloridos, así que no dude en tirar la cáscara de mango en el compost si lo prefiere.