Cómo usar aceite de neem para la sarna

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Usado con fines medicinales durante siglos en la India, el aceite de neem, del árbol del mismo nombre, es un pesticida natural y repelente de insectos particularmente útil. El aceite se usa con frecuencia para tratar el trastorno de la piel sarna, una infestación de una forma de ácaro diminuto llamado Sarcoptes scabiei. La sarna resulta de los ácaros que excavan en la piel para alimentarse de sangre. En el proceso, causan una picazón intensa. La sarna es muy contagiosa y puede propagarse rápidamente en las familias, las escuelas y otros lugares donde el contacto físico directo es común. El aceite de neem es una alternativa eficaz a los tratamientos sintéticos como la permetrina, según DiscoverNeem.com.

Infestaciones menores

Paso 1

Vierta un poco de aceite de neem puro en un paño limpio o una gasa y aplique el aceite directamente a cualquier infestación de sarna menor y localizada.

Paso 2

Deje el aceite sobre la piel de quince a veinte minutos para ayudar a eliminar los ácaros y reducir la hinchazón, el picor y la inflamación asociados con la sarna.

Paso 3

Repita la aplicación de aceite dos veces al día hasta que la infestación se haya resuelto.

Infestaciones establecidas

Paso 1

Vierta varias cucharadas de aceite de neem puro en un tazón pequeño y combínelo con 1/8 de taza de jabón líquido. Mezclar bien para emulsionar el aceite con el jabón.

Paso 2

Agregue la mezcla a un baño caliente y báñese completamente, para infestaciones de sarna bien establecidas o generalizadas.

Paso 3

Sumérjase en el baño durante quince a veinte minutos. También se puede aplicar una loción o crema a base de neem después del baño.

Paso 4

Continúe este tratamiento una vez al día hasta que la infestación se haya resuelto por completo. Repita el tratamiento para cualquier recurrencia.

Advertencia

Esta información es sólo con fines educativos. No pretende diagnosticar, tratar, curar o prevenir ninguna enfermedad y no ha sido evaluado por la Administración de Alimentos y Medicamentos. Consulte con su médico antes de usar cualquier régimen de tratamiento recetado por usted mismo.