Las moléculas de proteína están compuestas de subunidades llamadas aminoácidos. Veinte aminoácidos diferentes se encuentran en las proteínas del cuerpo. Nueve son aminoácidos esenciales, lo que significa que deben derivarse de los alimentos, y los 11 restantes no son esenciales, ya que el cuerpo puede fabricarlos si es necesario. De acuerdo con "Advanced Fitness Assessment and Exercise Prescription", un individuo saludable que mantiene una dieta bien balanceada no requiere suplementos de aminoácidos; ingerir grandes cantidades de aminoácidos puede suponer graves riesgos para la salud.
Aumento de peso
El destino de un aminoácido después de ser transportado al hígado depende en gran medida de las necesidades del cuerpo en ese momento. La ingesta de proteínas recomendada para una persona promedio es de 0,8 g por libra de peso corporal por día. Cualquier aminoácido que no se use en un corto período de tiempo no se puede almacenar para uso futuro, sino que se convertirá en glucosa y se quemará como energía o se convertirá en grasa o glucógeno para su almacenamiento. Dado que la dieta estadounidense promedio supera los requisitos diarios de proteínas, la suplementación innecesaria con aminoácidos puede provocar un aumento de peso.
Peligros para los atletas
De acuerdo con "Advanced Fitness Assessment and Exercise Prescription", los atletas de resistencia requieren de 1,2 a 1,4 gramos de proteína por libra de peso corporal por día; Los atletas de entrenamiento de fuerza necesitan de 1,6 a 1,8 gramos. Estos requisitos se cumplen fácilmente a través de la dieta. La suplementación con aminoácidos puede perjudicar a un atleta al aumentar el riesgo de deshidratación, ya que se requiere agua adicional para eliminar los subproductos del metabolismo de las proteínas. Además, la suplementación con aminoácidos dificulta que un atleta incorpore suficientes carbohidratos para garantizar reservas adecuadas de glucógeno en los músculos.
Desequilibrios de aminoácidos
Tomar suplementos de un solo aminoácido puede causar desequilibrios que pueden interferir con la absorción normal de los aminoácidos derivados de los alimentos. Ciertos grupos de aminoácidos compiten por los transportadores para transportarlos a través de la pared intestinal para ingresar al torrente sanguíneo. Cuando se ingiere un suplemento de aminoácidos, inunda los transportadores con ese aminoácido en particular, lo que puede provocar que otros aminoácidos no se absorban en las cantidades adecuadas.
Función renal
Procesar el exceso de proteína puede sobrecargar el hígado y los riñones dañados por la enfermedad. Las personas con enfermedad renal o hepática a menudo se someten a una dieta restringida en proteínas. Consumir una dieta alta en proteínas durante toda la vida puede ser responsable de la ligera disminución de la función renal que generalmente ocurre con la edad, según "Total Nutrition:The Only Guide You'll Ever Need". Sin embargo, esta conexión aún está bajo investigación.
Osteoporosis
La adición de suplementos de proteínas purificadas y mezclas de aminoácidos a las que se les ha eliminado el fosfato puede aumentar la excreción de calcio por los riñones. Un estudio publicado en el "American Journal of Clinical Nutrition" encontró que el consumo excesivo de proteínas es un factor de riesgo significativo para la pérdida de calcio. Ingerir cantidades excesivas de proteínas durante un período prolongado reduce la absorción de calcio y puede provocar la reabsorción ósea, lo que resulta en osteoporosis.