Ayurveda, una medicina antigua de la India que data de hace 5000 años, todavía proporciona una guía útil sobre cómo comer hoy. Estas ocho pautas ayurvédicas en particular pueden ayudar a promover una digestión saludable y niveles de energía estables.
1. Coma sólo cuando tenga hambre.
Es decir, come cuando tu comida anterior haya sido completamente digerida. En algún momento podemos pensar que tenemos hambre, sin embargo, solo puede ser que estemos deshidratados. Espere al menos tres horas entre comidas y sintonice las señales que su cuerpo realmente le está dando.
2. Coma en un lugar tranquilo y cómodo.
Siéntese cuando coma y coma con la menor distracción posible:sin televisión, sin libros, sin teléfono, sin computadora portátil. Si lo hace, le ayudará a perfeccionar su comida y cómo le hace sentir, saborear cada bocado y comer despacio y con atención.
3. Come la cantidad adecuada.
Todos somos diferentes, con diferentes tamaños de estómago y velocidades metabólicas. En Ayurveda, también tenemos diferentes constituciones de dosha que dictan cómo nuestros cuerpos digieren los alimentos. Escucha a tu cuerpo y come solo para apuntar cuando te sientas satisfecho.
4. Coma comidas calientes.
Lo ideal es que sus comidas estén recién cocinadas y se sirvan calientes, ya que los alimentos crudos pueden ser difíciles de digerir. Ayurveda recomienda evitar cualquier cosa que venga directamente del refrigerador para preservar su poder digestivo (Agni). Esto permite que sus enzimas digestivas funcionen de manera eficiente.
5. Come alimentos de calidad.
Evite los alimentos demasiado secos o demasiado grasosos. Prioriza las verduras cocidas, los cereales, la carne y los productos lácteos con moderación.
6. Esté presente cuando coma.
Usa tus cinco sentidos:Tómate el tiempo para apreciar el olor de tu comida, el aspecto de tu plato, la textura de tu comida, los diferentes sabores y los sonidos que haces cuando comes.
7. No comas demasiado rápido.
No se trague la comida después de un bocado, ¡tómese su tiempo para masticar! Masticar es un paso esencial de la digestión y no se puede apresurar.
8. Comer a la hora habitual.
A la naturaleza le gustan los ciclos y la regularidad, ya nuestro cuerpo también. Incluso si tiene una agenda ocupada, trate de mantener un tiempo constante todos los días para las comidas.