Los beneficios para la salud de la cúrcuma provienen principalmente de su principal agente activo, que es la curcumina. La enciclopedia World's Healthiest Foods explica que junto con los beneficios para la salud, la curcumina también es lo que le da a la cúrcuma su color amarillo. Sin embargo, la cúrcuma contiene algunas vitaminas, y comer un poco de cúrcuma a lo largo del día no solo lo ayudará a consumir las vitaminas necesarias, sino que aumentará su consumo de curcumina beneficiosa.
Vitaminas B
Las vitaminas B son las vitaminas más frecuentes en la cúrcuma, siendo la vitamina B6 la que tiene el mayor contenido. Una cucharada de cúrcuma contiene 0,122 mg de B6, según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos. La vitamina B6, también conocida como piridoxina, es necesaria para el metabolismo adecuado, la producción de glóbulos rojos, la producción de hemoglobina que transporta oxígeno a los tejidos y para que el sistema inmunológico y nervioso funcione correctamente, según los Institutos Nacionales de Salud. Otras vitaminas B también participan en estas funciones con B6 y se encuentran en la cúrcuma en cantidades mínimas.
Vitamina C
La vitamina C, también conocida como ácido ascórbico, es una vitamina esencial, ya que el cuerpo no puede producirla, por lo que la única forma de obtenerla es de los alimentos que consume o de los suplementos. Según el Instituto Linus Pauling, la vitamina C ayuda en la producción de colágeno, que es un componente básico de la piel y los tejidos. También ayuda a producir neurotransmisores, que son importantes para la función cerebral y ayudan a regular el estado de ánimo. Un poderoso antioxidante, la vitamina C es bien conocida por sus propiedades estimulantes del sistema inmunológico. Una cucharada de cúrcuma contiene 1,8 mg de vitamina C.
Vitaminas traza
Una cucharada de especia de cúrcuma también incluye pequeñas cantidades de vitamina E y vitamina K, con 0,21 mg de vitamina E y 0,9 mcg de vitamina K. La vitamina E es una vitamina antioxidante que ayuda a combatir el daño causado al cuerpo por las moléculas de radicales libres. La vitamina E también juega un papel en mantener fuerte el sistema inmunológico y en los procesos metabólicos del cuerpo, según los Institutos Nacionales de Salud. La vitamina K es una vitamina que a menudo no se menciona, hasta que se necesita. El NIH informa que la vitamina K juega un papel importante en la coagulación de la sangre y también se está estudiando por su papel en el mantenimiento de la salud ósea.